Al realizar trabajos de fachada, es importante no solo usar materiales de construcción y acabado de alta calidad, sino también para la herramienta a la que se aplicarán a las paredes del edificio. Una de estas herramientas es una espátula de fachada, que los siguientes consejos ayudarán correctamente.
En primer lugar, una espátula de fachada debe estar hecha de acero inoxidable, lo que garantizará su largo trabajo. Una espátula que está hecha de metal ordinario con un revestimiento de espejo, forjado bajo un acero inoxidable, se volverá inutilizable debido a la destrucción de la capa superficial y la óxido. Por lo general, tales técnicas son utilizadas por vendedores sin escrúpulos que intentan vender productos de baja calidad a un precio más alto. Un lubricante protector, que se aplica a una espátula de metal privada, ayudará a distinguir una falsificación de una espátula de acero inoxidable real. Recuerde que una espátula de acero inoxidable no contiene lubricantes protectores en su superficie.
En segundo lugar, una espátula de fachada debe tener un mango masivo, y su cuchilla debe ser elástica. La presencia de un mango masivo se debe a una gran masa de mezclas de acabado que se aplicarán con su ayuda. Se debe prestar especial atención al montaje del mango con la cuchilla. Solo la fijación confiable proporcionará la posibilidad de el uso prolongado de una espátula.
En tercer lugar, vale la pena elegir una espátula de fachada en la que el mango se encuentra en ángulo con respecto a la cuchilla. Esta disposición del mango facilitará la implementación del trabajo de fachada.
Y finalmente, dependiendo del volumen de trabajo de fachada, la espátula de la fachada debe seleccionarse con un ancho de la cuchilla de 200 a 400 mm.